El tiempo de las granjas como las conocíamos se está acabando, en Asia ya tenemos sus “sustitutas” del siglo XXI. En un mundo en el que lo digital marca el camino a seguir, las granjas de minado de criptomonedas o dedicadas a crear falsos likes o retuits son pequeños negocios en auge. Hoy te contaré cómo funcionan ambos tipos de granjas digitales y los fines que persiguen, ¡así que acompáñame hasta el final!
Granjas de likes (Click farms)
Se definen como instalaciones en las que se busca beneficiar la actividad online de personas o empresas a través de diferentes métodos en función de los objetivos, que son principalmente:
- Descarga de una aplicación y reseñas positivas de ésta, para situarla en las más descargadas y mejor puntuadas.
- Likes masivos a perfiles de redes sociales, con el fin de dar la falsa impresión de que el perfil es famoso o tiene éxito. También puede conllevar ingresos por parte del usuario propietario del perfil, contratos con marcas, etc.
- Retuits falsos, para poder viralizar mensajes específicos con fines económicos o políticos.
Como ves, el concepto es sencillo y eficaz, las funciones son variadas, y estamos hablando de un servicio fácilmente contratable desde diferentes páginas web.
¿Cómo funcionan?
Para llevar a cabo sus labores, las instalaciones suelen estar formadas por una cantidad descomunal de smartphones (Android, iOS o ambos) con diferentes números de teléfono asociados. La razón de los números de teléfono variados no es otra que permitir verificar con cada uno a un usuario diferente, cada uno para dar un like, un retuit o realizar una instalación.
Lo curioso es la forma en que emplean cada terminal, ya que según el sistema operativo recurren a diferentes métodos. En Android pueden automatizar las tareas, de manera que cada terminal trabaje como unidad autónoma. Por contra, en iOS están obligados a realizarlo de manera manual, por lo que necesitan a una persona realizando cada paso en cada dispositivo.
El auge de estos servicios se da en los países en desarrollo, como India, Filipinas o China, en los que aplicaciones como WeChat están plagadas de usuarios “falsos”.
Un ejemplo reciente
Uno de los casos más llamativos fue el reciente captado en Bangkok, en el que tres individuos de origen chino tenían una granja con 476 dispositivos móviles y un total de 347000 tarjetas SIM. El motivo por el que la policía paró su granja de clicks fue no disponer de un permiso de trabajo en Tailandia, pues su actividad se cataloga como legal.
Este tipo de negocios suponen un riesgo importante para las redes sociales, ya que la cantidad de cuentas de este tipo dañan al resto de usuarios, pero es tal el volumen que de desaparecer puede llegar a afectar al valor de Facebook, Twitter o WeChat.
Granjas de criptomonedas (mining farms)
Si hablamos de las granjas de clicks, es imposible no recordar las mencionadas granjas de criptomonedas que llevan años minando en la red, la mayoría desde territorio asiático. Como ya te comentamos hace unas semanas, para la obtención de éstas podemos encontrar en el mercado diferentes opciones: desde software que trabaje con los recursos de nuestro PC hasta equipos físicos destinados únicamente a trabajar como mineros de criptodivisas.
En los países en desarrollo es donde más económica resulta la energía, por lo que allí es donde ha nacido el término de mining farm o granja de minería. En ellas lo común es encontrar cientos de equipos especializados que trabajan en conjunto calculando los hash (valores criptográficos que equivalen a unidades de criptomonedas), organizados siempre por un equipo superior que coordine la operación.
¿Cómo funcionan?
Una vez está la instalación terminada, el funcionamiento es realmente sencillo: toca esperar. El proceso es cada vez más laborioso, por lo que la rentabilidad llega cuando los costes de mantenimiento de las instalaciones se mantienen bajo mínimos. Los principales costes son energéticos, pues los equipos empleados tienen un consumo que se une al de los sistemas de refrigeración, básicos en cualquier instalación informática.
Aquellos sitios que no disponen de recursos para poder invertir en equipos especializados, emplean alternativas como usar una red de equipos con gráficas potentes sobre las que corre un software de minado, que aprovecha la potencia de las GPUs. La aparición de estos métodos son parte del origen del aumento del precio en mercado de las gráficas y sus puntuales problemas de abastecimiento, algo que a más de uno puede llegar a suponer un problema
Conclusiones
Como conclusión destaca que Asia es la que más poder tiene en ambos casos, posiblemente por factores como el coste energético, disponibilidad de material más económico o facilidades legales. Algo muy a tener en cuenta es que en ambos casos se tiene un personal mínimo y, excepto en el caso de la minería de monedas virtuales, no es necesario disponer de unas instalaciones especializadas.
Está claro que las granjas de nuestros antepasados seguirán existiendo una temporada más, pero queda claro que las nuevas son un pasto de oportunidades para muchos. ¿Qué opinas de las click farm y las mining farm? ¡En los comentarios te espero!
