Uber, el operador de transporte fundado hace 6 años y que actualmente operar en más de 60 ciudades europeas y cerca de 600 en todo el mundo, ha sufrido un revés que podría hacer cambiar todo el estamento del transporte a nivel mundial.
Y es que un juez europeo ha dictaminado que este operador de transporte privado de pasajeros con chofer no es economía colaborativa, y que se tiene que regir por el mismo ámbito que hacen otras operadoras de taxi. Por tanto, Uber queda sometido a las regulaciones propias de los servicios en el ámbito de transporte.
El salseo
Hasta la fecha la defensa de Uber se centraba en su alegación de ser un proveedor de servicios digitales, y que por tanto (al igual que otras empresas de comercio electrónico) debía de pagar impuestos más bajos y disfrutar de una regulación mucho más beneficiosa para sus objetivos.
Ante esta situación claramente ventajosa, y viendo en Uber un caso de competencia desleal, los sindicatos de taxistas españoles denunciaron a UberPOP por prácticas abusivas. Según los sindicatos de taxista, la plataforma UberPOP tiene sobre ellos una enorme ventaja debido a diferentes condiciones de servicio.
Aunque la decisión de los tribunales es vinculante, no tendrá efecto de inmediato (las cosas de palacio…). No obstante, esta decisión judicial puede sentar precedente y cambiar el curso de este tipo de operadoras de transporte, como puede ser Cabify. Esto abre una puerta a que el sector se regularice de forma correcta y haya una competencia justa, no como pasaba hasta ahora.
¡Mutantes! ¿Creéis que esto hará que las tarifas se regularicen de manera que todos cobren lo mismo por trayecto? ¡Dejadnos vuestras opiniones!